Para irrumpir con éxito el mercado tecnológico, es indispensable pensar de manera global desde el inicio.
En el desarrollo de nuevas tecnologías y especialmente las relacionadas a dispositivos móviles, la mayoría de las veces, se destacan los productos que logran una alta penetración del mercado. Tomemos el siguiente ejemplo, Kakoa Talk es una aplicación de mensajería usada por más del 93% de los smartphones de Corea del Sur, la cual es considerada como superior a su competidor, y globalmente conocida aplicación WhatsApp.
Sin duda una penetración de mercado de esas magnitudes será considerada como un logro enorme desde los estándares de muchos expertos, pero en términos relativos a su competidor proveniente del Sillicon Valley, WhatsApp lleva por mucho una gran ventaja en el mercado global con mas 600 millones de usuarios activos vs. unos 50 millones de la App coreana.
Kakao Talk ha intentado diversas estrategias para expandir su mercado por fuera de Corea, a pesar de establecer unos objetivos muy claros para el continente de América, le ha tocado retroceder por diversas razones. Una esta ligada a los altos costos que implica posicionarse en nuevos regiones; y otra, la que ha dejado una lección al CEO Sigoo Lee, tiene que ver las diferencias culturales. ¿Pero son estas justificaciones legítimas?
La aplicación coreana parece haber atendido únicamente sus necesidades locales, dando poca importancia a sus oportunidades internacionales, lo que la ha limitado en su capacidad de expansión. Algo muy diferente ha sucedido con otros casos de éxito israelíes, que de igual manera comparten características tales como: ser mercados pequeños, manejar una lengua huérfana y ser culturalmente naciones muy fuertes.
Para ello, desde el inicio de vida (o quizás desde la idea) de una Startup, el ecosistema de desarrollo he investigación que en Israel se promueve, se incentiva a que las personas piensen en el atractivo internacional de sus desarrollos. Lo cual obliga a pensar estrategias globales, mirando el mundo como un sólo y único mercado desde el día cero.
El empresario Jon Medved, quien ha invertido en más de 100 Startups israelíes, reconoce que si no se piensa el mercado de manera global desde el día uno, ya lo estás perdiendo. Que en esa pequeña nación la gente sabe que con tan sólo lo local no bastaría para un reconocimiento internacional, “o vas global o no vas a ningún lado”.
Finalmente la lección sería pensar en tecnologías de uso global siempre, que se puedan acomodar a las necesidades de la mayoría, o bien descifrar cuales se pueden adaptar a cualquier tipo de culturas y poblaciones. No en vano, ha sido en Israel en dónde los primeros pasos de los sistemas de mensajería instantánea se dieron, fue el ICQ de Mirabilis el primer software que obtuvo un reconocimiento global cuando las computadoras personales llegaban a las casas, esto ya hace algunas décadas.
No dejes de revisar las empresas que desde Israel llegarán a Barcelona para instalarse en Mobile World Congress del 2 a 5 de marzo. Próximamente podrás encontrar reseñas en nuestro blog.
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