Cada 30 de noviembre se conmemora el Día de la Seguridad Informática, cuyo objetivo es exponer los riesgos que la seguridad cibernética presenta en los múltiples segmentos de la modernidad, especialmente ante la aceleración tecnológica suscitada y derivada del COVID-19.
Su instauración se remonta a 1988 con el descubrimiento de un virus cibernético en los sistemas de la Universidad de Cornell, posteriormente denominado “Gusano Morris”, que se propagó por los servidores de la universidad y del ARPANET -predecesor del internet-, lo cual marcó un punto de inflexión para el desarrollo y establecimiento de grupos de seguridad, auditoría, control, y concientización de los cibercriminales y virus.
Dentro del panorama internacional, la ciberseguridad es uno de los escalones a fortalecer en industrias y segmentos públicos, ya que su objetivo es detectar vulnerabilidades en sistemas, conservando la confidencialidad de la información, procesos y credibilidad de las industrias. Además de la prevención de ataques, incursiona en el diseño e implementación de procesos de capacitación, educación continua de la comunidad y de colaboradores.
A nivel mundial se ha registrado un incremento de casi 50% en los intentos de ciberataques, teniendo lugar 1 cada 11 segundos, en comparación al 2019 cuando se gestaba 1 cada 19, siendo los principales receptores el sector público, gobierno, educación y salud. En México se gestaron 85 mil millones de intentos de ciberataque en el primer semestre de 2022.
La falta de personal calificado para atender esta problemática es considerable; se proyecta a nivel internacional al 2025 una demanda de 3.5 millones de expertos en ciberseguridad; en México existen 500 mil especialistas, necesitando reforzarse ante un déficit de 300 mil para hacer frente a los riesgos, a la par de existir una falta de cultura de prevención, vital para evitar el robo de información y daño a procesos.
Los principales ciberataques a nivel nacional se enfocan en suplantación de identidad, phishing, vishing, ransomware financiero e industrial, resaltando las pérdidas en términos financieros, de credibilidad, robo de información y operatividad, siendo el costo estimado por ataque de 825 mil dólares en grandes organizaciones y en 38 mil dólares en PyMES.
En este contexto, Israel, referente internacional en la materia, cuenta con un ecosistema que ofrece soluciones para comercios e industrias, incluso del top 10 de empresas de ciberseguridad a nivel mundial, 2 son israelíes; además existen 14 unicornios enfocados en subsectores como la nube, protección punto a punto, ransomware y entrenamiento cibernético.
Hay ejemplos de tecnologías generadas por empresas israelíes enfocadas en la detección, prevención y gestión de sistemas de defensa, así como la implementación de Inteligencia Artificial en la ciberseguridad, entre las cuales se encuentran soluciones para prevenir ataques en lugares residenciales y redes de las PyMES, garantizando seguridad empresarial avanzada.
Dentro del aspecto de capacitación, soluciones en formato de plataforma web proporcionan a las empresas concientización en temáticas de seguridad y preparación cibernética para prevenir el mínimo ataque, mientras que las soluciones en organizaciones se enfocan en la protección de sistemas de salud, manufactura y lo empresarial, ofreciendo gestión de riesgo y vulnerabilidad.
Esta fecha resulta de relevancia al permitir dar seguimiento a las prioridades internacionales dentro de las necesidades de la industria y el desarrollo de mejores prácticas desde la sociedad; para dicho fin, Israel ofrece una interesante variedad de oportunidades que suman a la consecución de mayores y mejores vías de seguridad.
Para conocer más del ecosistema de ciberseguridad de Israel, no dudes en contactar a carla.rodriguez@israeltrade.gov.il